Hermandad del Santo Cristo de los Artilleros

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Historia

BREVE HISTORIA DE LA COFRADÍA DEL
SANTO CRISTO DE LOS ARTILLEROS
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     No se sabe con  exactitud la fecha en que el personal del Arma de Artillería empezó a acompañar a una imagen de Cristo, un Ecce Homo, pero esta tradición se remonta a los primeros años del siglo pasado.

   Por aquella época el Parque de Artillería se encontraba ubicado, hasta que fue destruido por el fuego el 19 de julio de 1.927, en el antiguo Colegio de San Ambrosio, en la hoy calle del Santuario, y próximo a él estaba la Iglesia de San Antón, situada en la calle del mismo nombre, que es el tramo de la actual de Simón Aranda comprendido entre José Mª Lacort y Santuario.

   En dicha Iglesia de San Antón se daba culto a un Ecce Homo, más conocido como Cristo de la Humildad o Cristo del Gallo, por tener un pequeño gallo a sus pies, que procedía de la Iglesia de la cofradía de Nuestra Señora de la Piedad, la cual fue derruida en el año 1.791 para abrir el tramo de  calle que une Fray Luis de León con Núñez de Arce.

   El autor de dicho Cristo parece ser que fue José de Rozas, que lo esculpió sobre el año 1.595. En la actualidad se encuentra en la capilla de los Mártires en el Santuario Nacional de la Gran Promesa.


Por el personal destinado en el Parque de Artillería se solicitó y consiguió dar acompañamiento a la citada imagen, que pertenecía a la cofradía de la Piedad. Sus primeras salidas las efectuó en la procesión del Santo Entierro, en la cual salían dos Cristos de la Caña, el que acompañaban los Artilleros y el de la Iglesia de la Santa Vera Cruz, éste sin acompañamiento específico, por cuya razón en la segunda década de nuestro siglo, el Arzobispo Don José María Cos  y Macho prohibió que salieran dos imágenes con la misma advocación, dejando de salir  por tal motivo la que lo hacía sin acompañamiento, el Ecce Homo de la Vera Cruz.

   Por intereses urbanísticos desaparece la Iglesia de San Antón, donde se custodiaba la imagen y por diferencias entre los copatronos de las cofradías, desapareció la imagen, pasando a la Iglesia de San Esteban, hoy Santuario Nacional, donde como hemos dicho se conserva en la actualidad.

   Al verse los artilleros sin su paso, solicitaron al Sr. Arzobispo que les fuese concedida la autorización para sacar y acompañar al Cristo de la Caña de Gregorio Fernández, al que acompañan en la actualidad y que se conserva en la Iglesia de la Santa Vera Cruz.

Dicho Cristo fue tallado en el año 1.622 por el gran imaginero Gregorio Fernández. Jesús se encuentra sentado, vestido con una clámide púrpura; en su mano derecha soporta una caña, que cae sobre el antebrazo izquierdo, que es el símbolo que le entregaron los judíos para expresar su condición de Rey. Sus sienes se encuentran coronadas de espinas, como segundo atributo de su realeza. La corona es de espinas naturales, pues Gregorio Fernández nunca las esculpió sobre la cabeza; al parecer, el imaginero personalmente trenzaba con sus manos espino natural en forma de corona, que posteriormente colocaba sobre la cabeza del Señor, dando con este gesto por rematada su obra.

   En sus orígenes el paso estaba compuesto por cuatro figuras: la del Cristo reseñado, un sayón enfrente en posición de rodillas ofreciéndole un ramo de cardos y otros dos soldados, con cascos diferentes y lanzas, uno de ellos en posición amenazadora. Sin saber como, los originales de estos sayones desaparecieron y fueron sustituidos por otros de muy inferior calidad, de autor desconocido y de tamaño más pequeños que poseriormente fueron quitados del Paso Procesional.


FORMACIÓN DE LA ACTUAL COFRADÍA


   Los primeros estatutos creando la cofradía actual datan del 25 de marzo de 1.944, firmando como Hermano Mayor el Excmo. Sr. General de Artillería Don Matías Zaragoza y como Secretario, el Capitán Don Lisardo Martín.

  Forman parte de esta cofradía todos los Jefes, Oficiales y Suboficiales del Arma destinados en la Plaza, así como los de Fábrica Nacional de Armas y los aprendices del Parque y de la citada Fábrica. Todos ellos asistían a las procesiones con el uniforme de gala para paseo. Solamente no llevaban uniforme los que portaban la Cruz, la pendoneta, los que conducían el paso y los que ordenaban las filas, para lo cual en la reunión prévia a la Semana Santa se designaban los cofrades correspondientes, que se vestían con el hábito de la cofradía, que es el mismo que se usa en la actualidad.

  La primera salida de la actual cofradía tuvo lugar el día 7 de abril de 1.944, día de Viernes Santo, en la Procesión General de la Pasión.

Los estatutos originales otorgaban el cargo de Hermano Mayor, vinculado al cargo que representaba, al General Jefe de Artillería de la 7ª Región Militar, si bien posteriormente y por falta de continuidad en el cargo, se tomó la decisión de nombrar Hermano Mayor a uno de los cofrades más antiguos y Hermano Mayor Honorífico al General.

 En la reunión del Cabildo General del año 1.957 se tomó la decisión de suprimir del paso a los tres sayones, para así realzar más la figura del Ecce Homo.

 El 15 de marzo de 1.971, en la reunión del Cabildo y por consejo de la Junta de Semana Santa, se acordó, a fin de conseguir una mayor uniformidad con el resto de las cofradías, dejar de usar el uniforme y sustituirlo por el hábito, que ya estaba reconocido en los estatutos, si bien dicho año y por falta de hábitos se salió de paisano.

  En el año 1.987 salen con la cofradía por primera vez cofrades femeninas. En la actualidad y con arreglo a los nuevos estatutos aprobados por el Sr. Arzobispo de Valladolid en la cofradía puede ingresar todo aquel que sienta un a especial devoción por la Sagrada Imagen a la que damos culto.


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